Lo que valen 20cm de plástico.

Una de las preguntas más comunes que recibimos es, ¿cuál es el premio cuando ganan? A lo cuál nuestra respuesta siempre es un poco enredada.

Es un poco difícil explicar que hacemos tanto, por tan poco.

Primeramente voy a responder a esa pregunta frecuente:

¿cuál es el premio cuando ganan?

R/ Un trofeo de plástico 20cm de alto para el ganador. Subirnos al podium (si hay) y un aplauso de nuestros seres queridos.

Pero permítanos llevarlo a través del real premio detrás de un trofeo.

1) Para iniciar el camino al podium, hay que tener FE y CREER en nuestras propias capacidades. Sólo el hecho de pensar "yo puedo" merece medalla de bronce.

2) Luego debemos trazarnos una serie de estrategias para "poder hacerlo" como capacitarse técnica, física, y emocionalmente. Estos significa una gran cantidad de prácticas, entrenamiento físico y capacitación emocional. La suma de estos ESFUERZOS es digna de una medalla de plata.

3) A estas alturas los segundos se vuelven fracasos, y las centésimas en frustraciones. Incluso se alcanza tal nivel de competitividad que los triunfos se llegan a cuestionar por los competidores que no tienen el mismo nivel de compromiso.

Pero es justo aqui donde se encuentra el mayor premio de todos, el premio que nadie nos da, ni nos puede quitar. El premio que no depende de puntos, o lugares en la parrilla, y es el premio de la SATISFACCION.

Hay muchos tipos de SATISFACCION, podemos sentirnos satisfechos por un tiempo, por una buena clasificación, por un buen resultado, incluso por un buen campeonato. Pero la mayor satisfacción es sentirnos como los únicos responsables de nuestras conquistas.

Bendiciones con forma de CAMPEONATOS

"El (Dios) es el dueño de todo. Le debo la oportunidad que tuve de llegar a donde llegué. Muchas personas tienen la capacidad, pero no tienen la oportunidad." Ayrton Senna

20 años de pasión por el kartismo.

(comunicado de prensa enviado Dic.2010)

Los Valerio conmemoran 2 décadas de crecimiento como preparadores técnicos y conductivos dentro de la disciplina que dictó su estilo de vida, el kartismo.

“Todo inició como un proyecto familiar, entre padre e hijo. Pero actualmente somos parte del proceso formativo de más de 15 pilotos”, explica Mario Valerio, fundador y director técnico de VRS. Así mismo, Jean Valerio, encargado de la formación conductiva, revela que: “ hoy por hoy mi mayor satisfacción es poder ver a mis pilotos cumplir sus objetivos deportivos.”

La evolución y persistencia de esta familia dentro del deporte, les ha permitido consolidarse como el equipo con mayor presencia en el kartismo a lo largo de la historia de ésta disciplina.

“Puedo recordar mi primera carrera, todo parecía tan sencillo. Hace 20 años me soñé como piloto profesional, pero convertirme en preparador de pilotos superó mis expectativas” confiesa Jean Valerio, piloto experto de kartismo quien acaba de sumar su décimo quinto campeonato a su lista de títulos nacionales e internacionales.

Como equipo y familia, fusionados en una empresa creen, que “Dios es quien ha estado adelante, en medio y detrás de este proyecto”. Jean agrega que su padre “es una institución por sí solo, el kartismo para mi papá no es solo una moda, o algo por hacer los domingos, él ha profesionalizado el kartismo.”

El kartismo nacional sigue siendo un deporte por descubrir, a pesar de ser conocido como el “semillero del automovilismo”, guarda gran anonimato en su práctica. Mario Valerio, reflexiona: “he tenido la bendición de trabajar en lo que más me apasiona, pero a largo de estos años siempre hemos tenido un gran ausente, un kartódromo profesional”. El kartismo se practica oficialmente dentro del Autódromo La Guácima, sin embargo el trazado utilizado por los kartistas no cumple con los estándares técnicos para dicha disciplina.

Ambos apasionados del kartismo concuerdan en que “el futuro cercano del kartismo es esperanzador en la medida en que se le de la importancia a la disciplina como responsable de formar pilotos profesionales”.